3 Retos para la igualdad de género en las artes y las humanidades
5 marzo, 2020Se acerca el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres. Una fecha significativa para el feminismo y la igualdad de género con gran peso histórico. La fuerza de este día es indiscutible y refleja una sociedad disconforme con la estructura social, económica, jurídica y política de la mujer hacia el hombre.
En todo el mundo se organizan movilizaciones para manifestarse contra las desigualdades y las violencias de género que se perpetúan en el tiempo. Nos sumamos a las reivindicaciones exponiendo 3 retos de cabecera para alcanzar la igualdad de género en las artes y las humanidades.
1. Visibilizar el impacto de la presencia femenina en la historia
La invisibilidad de las mujeres en la historia de las artes y las humanidades es una realidad reivindicada pero no combatida. Actualmente, podemos empezar a ver las primeras tonalidades lilas de un presente que se declara feminista, sin embargo, en el marco de las diversas acciones impulsadas desde los feminismos que buscan la igualdad y la equidad, el pasado sigue siendo un terreno para teñir de púrpura.
En la historia oficial, las mujeres son prácticamente invisibles. Los hombres han sido los principales objetos de estudio en las diversas disciplinas que caracterizan las artes y las humanidades: filosofía, historia, lengua, literatura, sociología, artes… y los protagonistas de las conclusiones del relato histórico difundido en el transcurso de la humanidad. Las grandes revoluciones sociales y culturales se ven enmarcadas por la relevante participación masculina, mientras que los referentes femeninos se mantienen en el margen.
Como afirma la AQU en su informe en relación a la incorporación de la perspectiva de género en la docencia: «La perspectiva de género en la docencia implica incluir el legado, la experiencia y la producción de las mujeres en diversos campos artísticos, filosóficos y filológicos.«.
La importancia de incluir la influencia clave de mujeres pensadoras, artistas, lingüistas, historiadoras, sociólogas… en los contenidos institucionales y materiales didácticos es imprescindible para hacer una relectura disciplinaria y transformar los discursos que imperan en el imaginario colectivo.
Siguiendo con esta revisión de la historia en relación con la visibilidad del género en clave feminista, también implica entender que es de gran importancia romper la visión etnocéntrica y de clase promovida desde los ámbitos de poder económicos e institucionales.
2. Identificar los sesgos de género reproducidos hasta la actualidad
Las artes y las humanidades tienen, como misión intrínseca, dotar de las bases y de los fundamentos para desarrollar un pensamiento crítico. Es una de las características principales de este ámbito del conocimiento.
Como anteriormente hemos desarrollado, gran parte de la historia oficial de las disciplinas que caracterizan las artes y las humanidades ha sido escrita por hombres, reproducida por hombres, y los hombres son los principales personajes del discurso. Dentro de esta dimensión androcéntrica de la realidad cotidiana, no sólo hay que visualizar la presencia de las mujeres en el marco teórico, también, para integrar la perspectiva de género en la docencia, hay que incluir los sesgos de género que se han reproducido hasta la actualidad e identificar los patrones que se perpetúan a lo largo del tiempo.
Este objetivo implica para la igualdad de género en las artes y las humanidades:
- Examinar de qué forma el género, como contribución social y cultural, atraviesa todos los fenómenos estudiados. En este análisis también proporcionar una visión que identifique los estereotipos de género que promueven la desigualdad.
- Identificar las desigualdades de género que se han dado y se dan en cada disciplina.
- Visibilizar las violencias de género reproducidas a lo largo de la historia hasta la actualidad.
Por ejemplo, en el sector literario, gran parte del público lector son mujeres y, sin embargo, predominan los títulos ofrecidos por el sector editorial bajo la autoría masculina. Dentro de esta desigualdad, a veces también se distinguen las obras literarias publicadas por mujeres en la categoría de «Literatura de mujeres» o «Literatura femenina», mientras que la «Literatura masculina» no existe. En el arte, gran parte de las obras expuestas en museos son producidas por hombres, propiciando la carencia de artistas femeninos referentes. En la filosofía el «Hombre» es sinónimo de «Ser humano», mientras que cuando se hace referencia a la mujer, sólo es la parte de ese concepto.
La gran cantidad de sesgos de género presentes en las artes y las humanidades es significativa. Esta revisión en perspectiva de género es indispensable para dotar a los discursos que imperan las artes y las humanidades en clave feminista.
3. Incluir a las mujeres en los espacios de prestigio y reconocimiento cultural
Se habla de paridad, de equidad, de igualdad de género, de encontrar este equilibrio entre los hombres y las mujeres, sin embargo, continuamos identificando que los espacios de poder, reconocimiento y prestigio son ocupados por los hombres.
El sector cultural no es una excepción. Poco a poco, con un goteo lento pero gradual, las mujeres van tomando más presencia en diversos ámbitos culturales. Aún así, esta visibilidad enmarcada por un discurso feminista, podemos percibir una tónica permanente: donde hay más presencia de mujeres son en los espacios reconocidos con menor prestigio cultural.
En este reto dentro del ámbito de las artes y las humanidades, está presente un doble objetivo. No sólo se trata de que los sitios ocupados por hombres proporcionen espacio al género femenino (independientemente de su origen cultural y su posición económica), también dotar de reconocimiento aquellos espacios donde las mujeres son y han sido protagonistas. Pues, precisamente por ello, posiblemente se consideran terrenos con menos reconocimiento social.
— Después de poner el foco en los retos para la igualdad de género en las artes y las humanidades, os invitamos a conocer 3 mujeres referentes de nuestros estudios.