En la XXI Semana de Ética y Filosofía política

Dos integrantes de Mussol han participado en la XXI Semana de Ética y Filosofía política celebrada entre el 2 y 4 de febrero en la Universitat Jaume I.  

Por un lado, Irene Gómez Franco presentó su libro Deudas pendientes. La justicia entre generaciones (Plaza y Valdés-CSIC) y, por otro, participó en la mesa titulada “Cautelas frente a los impactos de la IA desde la historia de las ideas morales y políticas”. Esta mesa estaba dedicada a reflexionar sobre los posibles inconvenientes acarreados por la IA en el ámbito ético y en el terreno político. Sin dejar de valorar sus aportaciones positivas, se ponía el acento en la importancia de tener en cuenta las dimensiones que pudieran resultar negativas de la aplicación de la IA desde la historia de las ideas morales y políticas en tanto que las cuestiones planteadas por las nuevas tecnologías son múltiples y pluridisciplinares y afectan a muchos de los problemas abordados por la ética y la filosofía política desde siempre. La charla de Irene Gómez se centró en el concepto de imaginación (arrancando de su dimensión crítica desde el pensamiento de Marina Garcés para desembocar en la imaginación en tanto que «visita al otro» de Hannah Arendt) articulando sus potencialidades para una perspectiva intergeneracional y proyectada hacia el futuro teniendo en cuenta nuestra relación con la máquina y la IA.

Por otro lado, Antonio Casado da Rocha participó en la mesa temática “Inteligencia artificial y colectiva: gobernanza algorítmica, plataformas digitales y participación democrática”, en la que se presentaron resultados y proyectos de investigación en torno a los usos de Decidim y otras plataformas para la democracia participativa, dando prioridad a sus aspectos éticos y tecnopolíticos. Al ser muy adaptable y configurable, todo depende de cómo funcione cada instancia de esta plataforma en relación con su “territorio” o público participativo, qué clase de interacciones promueva. Y ahí entramos en la importancia del diseño, que fue uno de los temas de la mesa. También se manifestó interés por articular diferentes formas y sistemas de inteligencia humana, artificial y colectiva con el objetivo de mejorar los procesos democráticos, lo que ha generado investigaciones en departamentos de matemáticas e informática, pero al ser un congreso de filosofía hablamos más del marco general (el “general intellect” marxiano) y la tensión entre la dimensión participativa y la deliberativa. Para ello, Antonio presentó la plataforma Gi2030, una instancia de Decidim para apoyar procesos de imaginación prospectiva y colectiva que se están realizando este año en varias localidades de Gipuzkoa.