Las huelgas del alquiler, una expresión por el Derecho a la vivienda

29 noviembre, 2017

La huelga, entendida como desobediencia o insumisión, es el último recurso de movilización y lucha no violenta que puede utilizar un colectivo contra un poder que actúa en contra de su dignidad. Se asocia con movimientos políticos, como respuesta a abusos del poder establecido por falta de libertades, por motivos nacionalistas, pacifistas… Pero es en el desarrollo y consolidación de los derechos sociales donde la huelga adquiere una importancia fundamental como herramienta de defensa de la ciudadanía. Mediante huelgas y movilizaciones hemos impulsado derechos sociales hoy indiscutibles como el trabajo, la educación, la sanidad o las pensiones, y con esas mismas herramientas ha defendido estos derechos cuando se han visto amenazados.

En la lucha por el Derecho a la vivienda tenemos recientes experiencias de desobediencia e insumisión que han logrado una importante repercusión, parcialmente han alcanzado sus objetivos pero en cualquier caso han representado y marcado un punto de inflexión en la concepción de la sociedad del Derecho a la vivienda. Serían ejemplo de ello los movimientos de resistencia contra desalojos forzosos, en España la propia Plataforma de Afectados por la Hipoteca, o los colectivos, familias y personas que ocupan sin título legal una vivienda vacía.

En el ámbito del alquiler también se ha recurrido a la huelga para defender el Derecho a la vivienda, y cuando se ha hecho tanto en el pasado como recientemente ha sido porque se han dado una serie de condiciones que no han dejado otra opción a la ciudadanía afectada. Podríamos pensar que si comparamos las huelgas de alquileres de Buenos Aires en 1907, Barcelona 1931, Varsovia 2010, Londres 2016 y Gran Canaria 2016 no tendrían que haber muchas similitudes ya que afectan a colectivos, sociedades y épocas diferentes. Pero por contra las causas y efectos que las provocan, las reacciones posteriores o los agentes implicados son y tienen comportamientos muy similares.

Las causas principales que se han dado en estos ejemplos han sido la carestía de vida, la precariedad social, el desempleo, la subida de alquileres, la especulación inmobiliaria, unas viviendas en mal estado, una regulación del alquiler que no protege al arrendatario y la falta de vivienda asequible o protegida de alquiler. En el caso de Buenos Aires en 1907 las viviendas donde residían de alquiler parte de la población obrera más precarizada, fundamentalmente inmigrantes europeos, fueron afectadas por un impuesto municipal que sus propietarios no dudaron en trasladar a los arrendamientos. En la Barcelona de 1931 miles de trabajadores inmigrantes de otras zonas de España malvivían hacinados en viviendas en mal estado y muchos estaban en situación de desempleo, en Varsovia en 2010 la población más vulnerable sufrió la privatización del parque público de vivienda que aunque estaba en un estado ruinoso conllevó subidas de hasta el 300%, en Gran Canaria en 2016 los afectados fueron una comunidad de inmigrantes africanos, algunos en situación irregular, que residían en infraviviendas por precios abusivos, y ese mismo año en Londres eran los estudiantes universitarios los que actuaron frente al incremento de las tasas de sus estudios, a su precario acceso al mercado laboral y al incremento de los precios de alquileres para estudiantes. En todos estos casos nos encontramos con modelos urbanísticos y legales que no limitan sino que alientan la especulación sobre la vivienda y que por el contrario no protegen, o lo hacen muy levemente, el derecho de los inquilinos a una vivienda digna. Además las administraciones competentes no disponían o habían impulsado el necesario parque de viviendas de alquiler asequible. En cualquier caso los afectados son colectivos precarizados que reclaman dignidad para sus vidas.

Los efectos sobre los afectados de estas situaciones; desahucios por impago de las abusivas rentas de alquiler, procesos de gentrificación y expulsión de residentes a otras áreas urbanas y situaciones generalizadas de pobreza energética que comportan el no disfrute de una vivienda digna además de los problemas de salud derivados. Así en Barcelona de 1931 o Varsovia de 2010 se multiplicaron los desahucios o en Gran Canaria, Varsovia y Londres las malas condiciones de las viviendas conllevaban graves problemas de salubridad para sus habitantes.

Ante estas situaciones fueron sindicatos de trabajadores o estudiantiles, asociaciones de vecinos o de inquilinos, o movimientos de base los impulsores de la reacción de los afectados. En Buenos Aires en 1906 la Federación Obrera Regional Argentina, formada por socialistas y anarquistas, creó la Liga de lucha contra los altos alquileres e impuestos, que dio amparo a las comunidades de inquilinos (conventillos) que se declararon en huelga de pago de alquileres. En Barcelona en 1931 fue la anarquista CNT mediante el Comité de Defensa Económica del Sindicato de la Construcción la que llamó a la huelga de los alquileres. En Varsovia en 2009 vecinos afectados por la privatización de sus viviendas crearon el Comité de Defensa de Inquilinos desde donde convocan asambleas en el barrio y apoyan a otros afectados, y en 2010 el sindicato anarquista ZSP convocó una huelga de alquileres en las viviendas afectadas por las privatizaciones. En Gran Canaria en 2016 fue la Federación Anarquista de Gran Canaria la que apoyó a los residentes afectados por las amenazas de desahucio de un propietario a responder mediante la denuncia y la suspensión del pago de rentas. Y en el mismo año en Londres el colectivo de estudiantes “UCL Free Education” inició la campaña “Cut the Rent” con la que 150 estudiantes dejaron de pagar el alquiler.

Las reacciones y consecuencias a estas movilizaciones no fueron tan homogéneas como sus causas, aunque la represión por parte del poder judicial y ejecutivo fue similar, al menos en las huelgas que fueron contemporáneas. Así en Buenos Aires durante la huelga de 1907 fue asesinado un militante por las fuerzas de orden público, en Barcelona en 1931 igualmente los desahucios se hicieron más violentos y la acción policial causó la muerte de 18 personas además de centenares de detenciones y procesamientos. Las huelgas de Varsovia, Londres o Gran Canaria no han tenido las mortales consecuencias de la represión del siglo pasado, pero el poder judicial y las fuerzas de orden público siempre actúan de forma contundente en base a la legislación y autoridad dada, especialmente cuando entienden que se desobedece a alguno de los principios generales del sistema, y la propiedad privada lo es. Así por ejemplo Ruymán Rodríguez, uno de los líderes de la huelga de Gran Canaria, fue detenido y acusado de un delito de resistencia, o la condena a prisión que sufrió el líder político polaco Piotr Ikonowicz por su participación en movilizaciones ante desahucios. Y es que el Estado, alentado por el poder económico de la propiedad, no es indiferente ante las importantes repercusiones de estas movilizaciones que aún iniciándose de forma aislada se extienden cuando la precariedad está generalizada. Así ocurrió en Buenos Aires en 1907 donde de inicialmente un único “conventillo”, una comunidad formada por 130 familias, se declaró en huelga de alquileres, pero ésta se extendió durante tres meses por otros municipios de la provincia de Buenos Aires como Avellaneda, Rosario, Bahía Blanca, Mar de Plata y La Plata y también a otras Provincias como Mendoza o Córdoba, sumándose a ella más de 700 “conventillos” lo que representó una participación cercana a las 100.000 personas en las movilizaciones. O en abril de 1931 en el barrio de la Barceloneta de Barcelona, lugar donde se inicia la huelga de alquileres y que hasta diciembre de ese mismo año se suman muchos barrios populares de la ciudad como Sants, El Clot, Poblenou… y se extiende a ciudades limítrofes como L’Hospitalet o Santa Coloma de Gramenet, con un seguimiento según la CNT de entre 50.000 y 100.000 hogares. También el éxito de las movilizaciones de los vecinos de un edificio de viviendas que iba a ser privatizado en Varsovia en 2009 hace que el Comité de Defensa de los Inquilinos creado por ellos sea la plataforma necesaria junto con el sindicato ZSP para extender la Huelga de alquileres en 2010 y 2011 a otros edificios en la misma situación. Y finalmente en enero de 2016 en Londres 150 estudiantes de la UCL alojados en sus residencias inician una huelga de alquileres, en mayo ya son más de 1.000 los que la secundan y con el apoyo de la Radical Housing Network, red de activistas por el derecho a la vivienda de Londres, y de los principales sindicatos estudiantiles la huelga se extiende a otras universidades de Londres como Goldsmiths, Roehampton y el Courtauld Institute.

Estos ejemplos de huelgas de alquileres, que han tenido un seguimiento muy importante entre los afectados, siempre han representado un punto de inflexión. La huelga de alquileres de Buenos Aires de 1907 que planteaba además de reformas laborales, rebajas del 30% de los alquileres, viviendas en mejor estado y garantías en los desalojos, consiguió que buena parte de los propietarios accedieran a rebajar los alquileres, pero sobretodo creó un nuevo espacio reivindicativo que a través de la Liga Pro Rebaja de Alquileres introdujo el derecho a la vivienda en el debate político al mismo nivel que los derechos laborales básicos, al fin al cabo la población afectada era la misma, el proletariado más precarizado. Un buen ejemplo de esta consecuencia política se dio en la provincia argentina de Mendoza donde en 1916 por vez primera una Constitución hace referencia al derecho a la vivienda [1]. La huelga de Barcelona de 1931 a pesar de su dilación y resistencia a la dura represión gobernativa, no obtuvo los resultados deseados por los inquilinos afectados, principalmente una rebaja del 40% de los alquileres, si que algunos propietarios rebajaron los alquileres y que la reacción y solidaridad popular hizo posible parar muchos desahucios pero sobretodo replanteó las políticas públicas de construcción de vivienda social de la incipiente República Española y de la Generalitat de Catalunya. Además los inquilinos pasaron a autoorganizarse en asociaciones como la Unión de Inquilinos o L’Associació de veïns i llogaters de Catalunya, que estuvieron operando hasta la derrota republicana en la Guerra Civil de 1939. En 2011 en Varsovia se consiguieron frenar desahucios, el realojo de inquilinos en viviendas en mejor estado, y aunque pocas privatizaciones de edificios de viviendas se consiguieron parar el Parlamento rechazó una segunda ley que aún liberalizaba más el mercado de vivienda. El Comité de defensa de Inquilinos continúa trabajando apoyando a otros vecinos de Varsovia y del resto de Polonia. En 2016 la movilización de la comunidad de 16 viviendas de un edificio de Gran Canaria, consiguió mediante la amenaza de denuncia y de huelga de alquileres que la propiedad aceptara formalizar los contratos de arrendamiento, mejorar la habitabilidad del edificio, rebajar los alquileres y renunciar a reclamar atrasos de rentas anteriores. Esta victoria animó a parte de sus participantes a impulsar el Sindicato de Inquilinos de Gran Canaria que en enero de 2017 anunció su fundación. También fueron un éxito los resultados de la huelga de alquileres de Londres de ese mismo año, el rectorado de la UCL se comprometió a mejorar los alojamientos, congelar los alquileres de forma general y rebajarlos a los estudiantes con menos recursos, dotando para ello un fondo de 350.000 libras como ayudas para ese año y de 500.000 libras para el siguiente, y a no reclamar las rentas impagadas durante la huelga. Este ejemplo está animando a movilizaciones futuras en Londres, una de las ciudades con alquileres más elevados de Europa.

Todas estas experiencias demuestran que ante la pasividad de las administraciones públicas por atender las necesidades básicas de la ciudadanía más precarizada, está se organizará o se dejará guiar por movimientos de base para poder defender derechos fundamentales como el de la vivienda. Es significativa en estos ejemplos la relevancia de la población inmigrante como principal afectada de un mercado de alquiler abusivo, igualmente es destacable la siempre presencia de movimientos libertarios en la articulación de estas huelgas. Los gobiernos competentes en materia de vivienda deben promulgar leyes que fomenten el alquiler como una opción digna, para ello también deberán regular aspectos críticos como su accesibilidad y asequibilidad. Complementariamente las administraciones también deben dotarse de un amplio parque público de alquiler a la vez que favorece otras fórmulas de promoción de vivienda social colaborativa.

(Visited 32 times, 1 visits today)

Notas

[1] Constitución de la Provincia de Mendoza de 1916. Art. 45: La Legislatura dictará una ley de amparo y reglamentaria del trabajo de las mujeres y niños menores de dieciocho años, en las fábricas, talleres, casas de comercio, y demás establecimientos industriales, asegurando, en general, para el obrero, las condiciones de salubridad en el trabajo y la habitación.

La huelga de inquilinos de conventillos de 1907. Silvina Pascucci. Cartelera de Historia.

https://carteleradehistoria2.wordpress.com/2009/08/17/la-huelga-de-inqulinos-de-conventillos-de-1907-por-silvina-pascucci/

2. La huelga de inquilinos de 1907. Felipe Pigna. El-historiador.com.ar

http://www.el-historiador.com.ar/articulos/republica_liberal/la_huelga_de_inquilinos_de_1907.php

3. Huelga de los inquilinos, historia de los conventillos de Buenos Aires. Claudio Pellini. Historiaybiografias.com

http://historiaybiografias.com/conventillos1/

4. La huelga de alquileres y el comité de defensa económica. Manel Aisa. Ed El Lokal

5. El día que los barceloneses dejaron de pagar el alquiler. Clara Blanchar. El País

http://ccaa.elpais.com/ccaa/2015/08/16/catalunya/1439744036_549759.html

6. Inquilinos en huelga en Varsovia. Sebastián Frei. Diagonal

https://www.diagonalperiodico.net/global/inquilinos-huelga-varsovia.html

7. Polonia: ¡A la cárcel por defender a jubilados arrojados a la calle!. Stefan Bekier. Sinpermiso.info

http://www.sinpermiso.info/textos/polonia-a-la-crcel-por-defender-a-jubilados-arrojados-a-la-calle

8. Ciento cincuenta estudiantes lanzan una huelga de alquileres en Londres. Thomas Youngman. Diagonal

https://www.diagonalperiodico.net/global/29271-ciento-cincuenta-estudiantes-londinenses-lanzan-huelga-alquileres.html

9. Estudiantes, alquileres, huelga y victoria. Todoporhacer.org

https://www.todoporhacer.org/estudiantes-alquileres-huelga/

10. Huelga de alquileres. FAGC. Regeneraciónlibertaria.org

https://www.regeneracionlibertaria.org/huelga-de-alquileres

11. Nace el Sindicato de Inquilinos de Gran Canaria. Revista Nada.

https://revistanada.com/2017/01/27/nace-el-sindicato-de-inquilinos-de-gran-canaria/

Autor / Autora
Xavier Anzano Bergua
Arquitecto técnico, graduado en Ciencias y Tecnologías de la Edificación.
Linkedin" rel="noreferrer noopener">Linkedin
Comentarios
Deja un comentario