Alimentación infantil: ¿cómo preparar desayunos y meriendas sanas y sostenibles?
21/02/2023La Organización Mundial de la Salud y el International Obesity Task Force llevan varios años alertando de un incremento sostenido y gradual del sobrepeso y la obesidad infantil. España, en concreto, tiene una de las prevalencias de obesidad infantojuvenil más significativas de Europa, según el Informe Regional Europeo de Obesidad 2022. Para hacer frente a esta problemática y mitigar el impacto medioambiental de nuestra dieta, es necesario un cambio global urgente y apostar por patrones de alimentación que garanticen la salud individual y planetaria desde la infancia. En este artículo, Anna Bach Faig, Alicia Aguilar Martínez y Nadia San Onofre Bernat, profesoras del máster universitario de Nutrición y Salud de la UOC, apuntan varias recomendaciones para preparar desayunos y meriendas sanas y sostenibles. ¡Toma nota!
Siete claves para preparar desayunos y meriendas sanas y sostenibles
- Planificar bien las comidas. Durante la etapa escolar es importante que los niños y niñas realicen 4 o 5 ingestas moderadas al día. De ahí que a esta edad se recomiende desayunar y merendar bien. A la hora de preparar estas comidas es importante priorizar la fruta fresca, los frutos secos, los cereales integrales, las verduras y las legumbres.
- “Predicar con el ejemplo” e involucrar a las niñas y niños en la cocina facilita la aceptación de los alimentos y tiene buenos resultados en la promoción del consumo de frutas y verduras. Se ha demostrado que los miembros de la familia y las personas más cercanas a los más pequeños son sus referentes. De esta manera, si los adultos siguen hábitos alimentarios saludables, se transmitirán de manera natural.
- Ofrecer variedad de verduras y frutas de temporada como refrigerio ayuda a cumplir las recomendaciones de ingesta de estos alimentos desde edades tempranas.
- Preparar las comidas teniendo en cuenta la temporalidad de los productos. Los alimentos de temporada son más económicos, sostenibles y añaden variabilidad a la dieta.
- Apostar por alimentos de producción local. Para conseguir que nuestras comidas sean sostenibles, hay que priorizar los alimentos más cercanos posibles a nuestra residencia (radio de 100 kilómetros).
- Priorizar los envases reutilizables o comprar a granel. Es recomendable evitar los batidos y zumos en tetrabrik, así como prescindir de los paquetes individuales de frutos secos o cereales para minimizar envases de un solo uso y priorizar los envases reutilizables. En este sentido, la compra de alimentos a granel es una alternativa sostenible que permite adquirir solo las cantidades necesarias, sin tener que aceptar los formatos estandarizados (en kilogramos o litros de productos).
- Evitar el desperdicio de alimentos. Se calcula que alrededor de un tercio de los alimentos que se producen en el mundo se pierden o se desperdician. Por ello, es importante comprar solamente los productos necesarios, hacer un correcto almacenaje de los alimentos y controlar las fechas de caducidad. Otra opción para evitar el despilfarro alimentario es practicar una cocina de aprovechamiento.
Ejemplos de desayunos y meriendas saludables y sostenibles
- Macedonia de fruta de temporada con frutos secos y tostada de pan integral con aceite de oliva y romero.
- Bocadillo integral con pisto de verduras, piñones y bonito.
- Bebida vegetal o leche con canela y tostada de pan integral con paté vegetal o humus.
- Bizcocho casero integral de zanahoria y almendra con una pieza de fruta de temporada.
- Yogur natural con avena y fruta de temporada.
Seguir estas recomendaciones y un patrón de dieta mediterránea es óptimo para que nuestras comidas sean sanas y sostenibles: además de ser una alternativa capaz de garantizar el adecuado aporte de nutrientes y de prevenir las enfermedades crónicas no transmisibles, la Dieta Mediterránea también tiene bajo impacto ambiental. Y tú, ¿te animas a empezar a comer más sano y sostenible?
*Para más información puedes consultar el artículo La fórmula para desayunos y meriendas infantiles sanos y sostenibles, publicado el 14 de noviembre de 2022 en The Conversation.