12 conceptos de ciberseguridad para estar protegido en la red

29 febrero, 2024

La ciberseguridad ya no es un tema pasajero. Ataques tan significativos como el que el Hospital Clínic de Barcelona sufrió en marzo del 2023 nos hizo más conscientes que nunca que todos —personas y empresas— tenemos que velar por la seguridad de nuestros datos en la red.

El crecimiento de amenazas cibernéticas  se ha traducido en una mayor demanda de servicios de ciberseguridad; de hecho, se calcula que en 2024 se necesitará 80.000 profesionales en el sector y, según el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), en España hay aún 30.000 vacantes sin cubrir.

En este contexto, las empresas son el actor más expuesto. La digitalización y, especialmente, el big data generan una gran cantidad de datos, y un ciberataque puede provocar la pérdida o el robo de información sensible.

A pesar de los evidentes riesgos empresariales, los particulares tampoco son ajenos al problema. Cada vez más personas realizan transacciones bancarias, compras online y comparten información personal a través de Internet. La falta de seguridad en los dispositivos y las conexiones puede exponernos a importantes riesgos financieros y de privacidad, como el robo de identidad o el acceso no autorizado a sus datos personales.

La necesidad de protegerse en la red es evidente. Para aumentar esta protección, a lo largo de este artículo hablaremos de doce conceptos que nos ayudarán no solo a prevenir ataques informáticos, sino a detectar posibles amenazas.

CIA triad

La CIA triad es un concepto fundamental en el campo de la ciberseguridad. Esta tríada representa los tres pilares fundamentales que deben protegerse para garantizar la seguridad de la información: Confidencialidad, Integridad y Disponibilidad (confidentiality, integrity and availability, en inglés).

La confidencialidad se refiere a la garantía de que la información solo esté disponible para las personas autorizadas y no llegue a manos equivocadas. La integridad, por su parte, asegura que la información mantenga su precisión y no sea modificada de manera no autorizada. Por último, la disponibilidad implica que la información esté disponible y accesible cuando sea requerida.

Security operations centre y security information and event management

El Security operations centre (SOC) y el Security information and event management (SIEM) son dos componentes esenciales en la estrategia de ciberseguridad de una organización. El SOC, o Centro de Operaciones de Seguridad, es un equipo especializado encargado de supervisar y responder a incidentes de seguridad en tiempo real. Su objetivo es detectar y mitigar cualquier amenaza o actividad maliciosa que pueda comprometer la seguridad de los sistemas y datos. Por otro lado, el SIEM, o Gestión de Información y Eventos de Seguridad, es una solución tecnológica que permite recopilar, analizar y correlacionar registros de eventos y datos de seguridad procedentes de diferentes fuentes.

De hecho, el SOC utiliza herramientas como el SIEM para garantizar una defensa eficaz contra las ciberamenazas. Mientras que el SOC se encarga de la supervisión y respuesta en tiempo real, el SIEM proporciona la capacidad de análisis y correlación de datos para detectar patrones y tendencias en la seguridad. De esta manera, el equipo del SOC puede tomar decisiones informadas y responder de manera proactiva ante las posibles amenazas.

Advanced persistent threat

El Advanced persistent threat (APT), o Amenaza Persistente Avanzada, es un tipo de ataque informático altamente sofisticado y dirigido, que busca obtener acceso no autorizado y persistente a redes o sistemas específicos durante un largo período de tiempo. Este tipo de amenaza es llevada a cabo por actores cibernéticos altamente capacitados, como grupos de cibercriminales o incluso agencias de inteligencia estatales, y a menudo oímos hablar de ellos en las noticias.

El objetivo principal de un APT es obtener información confidencial o llevar a cabo actividades maliciosas de forma prolongada sin ser detectado y, por ello, es una de las amenazas más graves y persistentes en el ámbito de la ciberseguridad actualmente.

Los APT se caracterizan por su capacidad para evadir las medidas de seguridad tradicionales y permanecer ocultos en los sistemas comprometidos durante largos periodos de tiempo. Esto se logra mediante el uso de técnicas avanzadas, como el uso de malware personalizado y sigiloso, el aprovechamiento de vulnerabilidades específicas o el empleo de técnicas de ingeniería social sofisticadas.

Multi-factor authentication

La autenticación multifactor es, posiblemente, el concepto de este listado que nos resulta a todos más familiar. Se trata de un método de seguridad que requiere que el usuario demuestre su identidad a través de diferentes medios o factores, en lugar de depender únicamente de una contraseña.

Este sistema, que solemos usar, por ejemplo, en nuestros accesos a las entidades bancarias, proporciona una capa adicional de protección, ya que incluso si un factor de autenticación se ve comprometido, los otros factores seguirán protegiendo la cuenta o el sistema.

Zero trust model

El zero trust model, o Modelo de Confianza Cero, es una metodología que se utiliza en el ámbito de la ciberseguridad para fortalecer la protección de los recursos y datos en línea. Este enfoque se basa en el principio fundamental de que no se debe confiar en ningún usuario o dispositivo, tanto dentro como fuera de la red, y que hay que verificar, no confiar.

En un modelo de confianza cero, se implementan varias capas de seguridad y autenticación para garantizar que solo los usuarios autorizados tengan acceso a la información y recursos concretos y, en ningún caso, se otorga acceso libre a todos los datos de la organización.

Virtual private networks 

Las virtual private networks, conocidas mayormente por sus siglas VPN, son herramientas fundamentales en el ámbito de la ciberseguridad. Estas redes permiten establecer conexiones seguras y cifradas entre dispositivos a través de una red pública, de manera que los datos puedan viajar encapsulados por este túnel de manera segura, evitando posibles interceptaciones o ataques malintencionados.

En el contexto actual, donde el teletrabajo y la movilidad son cada vez más frecuentes, las VPNs son especialmente útiles para garantizar la seguridad de la información transmitida a través de conexiones wifi públicas o redes no confiables. De hecho, muchas de aquellas personas que trabajan en remoto desde su domicilio hacen uso de VPNs para la seguridad tanto personal, como de la empresa.

Distributed denial-of-service attack (DDoS)

El distributed denial-of-service attack (DDoS) es una de las amenazas más comunes y peligrosas en el ámbito de la ciberseguridad. Consiste en inundar un servidor o una red con un gran volumen de tráfico malicioso, superando su capacidad de procesamiento y provocando una interrupción en los servicios o la caída del sistema.

El objetivo principal de un ataque DDoS, que se realiza a través de bots distribuidos en diferentes ubicaciones geográficas, es provocar daños, perjudicar la reputación de una organización o interrumpir sus servicios. Los motivos pueden ser diversos, como la extorsión, la competencia malintencionada o el activismo cibernético.

Este tipo de ataque aumentó un 57% en el primer trimestre de 2023 respecto al mismo periodo del año anterior.  Además, también en 2023 fue noticia el hecho de que Google, Microsoft, Amazon y Cloudflare mitigaron el mayor ataque DDoS registrado hasta el momento, una amenaza cuyas consecuencias hubieran sido notables en caso de que los hackers hubieran logrado su objetivo.

Social dngineering attacks

Los ataques de ingeniería social (no confundir con ingeniería inversa) son una forma de manipulación psicológica que explota las debilidades humanas con el objetivo de obtener información confidencial o acceso no autorizado a sistemas o redes. Estos ataques se basan en la interacción y el engaño para persuadir a las personas a revelar información o realizar acciones que beneficien al atacante.

Los atacantes utilizan técnicas  cada vez más sofisticadas, y que van desde la suplantación de identidad, a la creación de perfiles falsos en redes sociales, el phishing y el envío de correos electrónicos o mensajes engañosos, entre otros.

Estos ataques son muy comunes. Tener un mínimo de conocimientos sobre seguridad cibernética y estar alerta ante cualquier sospecha puede ayudar a prevenir la caída en sus trampas.

Zero day attack

En el ámbito de la ciberseguridad, un ataque de día cero (zero day attack) se refiere a la explotación de una vulnerabilidad desconocida en un sistema o software. En otras palabras, es un ataque que aprovecha una falla en el código que aún no ha sido descubierta ni parcheada por el desarrollador.

Esta forma de ataque es especialmente peligrosa, ya que no hay medidas de seguridad o soluciones disponibles para protegerse contra ella y encontrar una solución es más difícil que en otros casos, lo que deja a los afectados expuestos durante mayor tiempo.

Para mitigar el riesgo de un ataque de día cero, es fundamental contar con un enfoque proactivo. Esto implica mantener los sistemas y software actualizados, instalar parches de seguridad tan pronto como estén disponibles y emplear soluciones de seguridad avanzadas que puedan detectar y bloquear posibles amenazas.

Cryptojacking

El cryptojacking es una técnica utilizada por los ciberdelincuentes para aprovecharse del poder de procesamiento de las computadoras de otras personas o empresas con el objetivo de minar criptomonedas en el ordenador de la víctima.

Los atacantes logran esto mediante la inyección de código malicioso en los sistemas comprometidos, ya sea a través de un archivo malicioso descargado, un enlace malicioso o incluso a través de anuncios.

Frente a este tipo de ataques, es recomendable evitar descargar archivos o hacer clic en enlaces sospechosos, y utilizar extensiones o herramientas de bloqueo de scripts en los navegadores web para evitar la ejecución de código malicioso.

Passwordless

La autenticación sin contraseña (o passwordless) es una metodología segura y eficiente para acceder a sistemas y aplicaciones sin la necesidad de recordar contraseñas complejas. Esta forma de autenticación utiliza diferentes métodos para verificar la identidad del usuario sin requerir una contraseña tradicional.

El passwordless no se basa en el uso de la biometría, sino que va más allá con el objetivo de detectar los dispositivos de los usuarios sin la necesidad de pedir contraseña si con el mismo dispositivo ya se identifica a la persona. Aquí entran múltiples factores que identifican únicamente a cada persona a partir de la configuración del dispositivo que utiliza para conectarse, eliminando tener que pedir cada vez la contraseña, biometría o código de acceso. 

Ciberresiliencia

La ciberresiliencia hace referencia a la capacidad de una organización o sistema para resistir, adaptarse y recuperarse del impacto de un ataque cibernético. Este concepto se integra de manera complementaria con la ciberseguridad, pues mientras esta última se enfoca en la prevención de ataques, la ciberresiliencia aporta la capacidad esencial de recuperación ante eventos adversos en el ciberespacio. Esencialmente, se trata de la capacidad de mantener la integridad y la funcionalidad de los sistemas, incluso en situaciones de crisis digital, asegurando así la continuidad operativa y la protección de los activos digitales de la organización.

Para que la ciberresiliencia sea exitosa, es necesario implementar una serie de medidas y prácticas, que incluyen desde el backup y recuperación de datos, a la división de las redes de trabajo, la monitorización constante de los sistemas o, por supuesto, la formación del personal en materia de ciberseguridad.

Formarse en ciberseguridad, una opción de futuro

Como hemos visto a lo largo de este glosario de ciberseguridad, las amenazas informáticas son muchas y muy variadas, y no paran de crecer. El factor humano es esencial para prevenir ataques y, para estar preparados, la formación es la mejor opción.

Ante estas nuevas amenazas, de las que hace unos pocos años no habíamos oído ni hablar, el máster universitario online en Ciberseguridad y Privacidad de la UOC ofrece una formación especializada en las últimas tendencias y herramientas de ciberseguridad.

Con un enfoque práctico y actualizado, este máster te dotará de las habilidades y el conocimiento necesarios para destacar en un mercado laboral que clama por expertos. No es solo una inversión en tu futuro profesional, sino en la seguridad y bienestar de la sociedad digital en la que vivimos. ¿Estás listo para tomar el reto y convertirte en un líder en la defensa contra las ciberamenazas?

 


Este artículo es fruto de la Cátedra Internacional ARTEMISA de Ciberseguridad. Una iniciativa financiada por INCIBE a través de los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiados por la Unión Europea (Next Generation), el proyecto del Gobierno de España que traza la hoja de ruta para la modernización de la economía española, la recuperación del crecimiento económico y la creación de empleo, para la reconstrucción económica sólida, inclusiva y resiliente tras la crisis de la COVID-19, y para responder a los retos de la próxima década.

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Autores / Autoras
Redactora de continguts
Directora del Máster Universitario en Seguridad de las Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones de la UOC, UAB y URV.
Doctor en Ingeniería Informática por la UOC y profesor en la misma universidad. Además, es especialista en Ciberseguridad y hacking ético.
Comentarios
Daniela5 marzo, 2024 a las 5:21 pm

¡Qué excelente recopilación de conceptos esenciales en ciberseguridad! Este artículo ofrece una visión completa y detallada de las amenazas y las medidas necesarias para protegernos en la red. La manera en que aborda desde la tríada CIA hasta la importancia de la ciberresiliencia refleja la complejidad y la urgencia de fortalecer nuestras defensas en un mundo cada vez más digitalizado y expuesto a ataques cibernéticos. https://widetech.co/

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