Tiempo de avatares

17 enero, 2023
Foto: Freepik.

(Més avall trobareu la versió en català d’aquest contingut: Temps d’avatars.)

Estamos entrando en una era digital en la que los protagonistas son los avatares. No estamos desplazando a las personas de forma absoluta para sustituirlas por extensos códigos máquina que, conjuntamente con la inteligencia artificial, son capaces de contestar a las preguntas más habituales que cada uno de nosotros podemos formular y de paso, darles aún más material para sus bases de datos digitales.

Los campos de aplicación de la nueva estrategia comunicativa es tan extenso como complejo, van desde los chatbots de algunas empresas que solo necesitamos contestar a preguntas simples, como una dirección, una forma de dar de baja a un servicio o comunicar una avería, pasando por otros más complejos que cuesta saber si estamos delante de una máquina o de una persona. Todo depende de varios factores, pero siempre con un objetivo muy claro; comunicar!

Justamente de esto se trata este artículo, de exponer el discurso como una herramienta divertida y que llegue a un determinado público y de una forma completamente distinta.

No queremos explicar ni entrar en detalle cómo es programar un chatbot o cuáles son las casuísticas que obligan a una entidad a desarrollar este sistema: queremos hablar de cómo comunicar en una era digital donde lo visual es tan importante como el propio discurso. Poder y saber compaginar el discurso con la visualización son premisas por el orador y para la propia adaptación del discurso con los formatos actuales.

En este punto, estaríamos ahora pensando que la mejor forma de poder adaptar el discurso a un contenedor digital, pasa expresamente por un formato audiovisual estándar, como es el vídeo. Y sí, es verdad, podemos realizar un buen trabajo de preedición con un guión divertido, teniendo en consideración aspectos tan importantes del lenguaje visual, como los tipos de planos, las localizaciones, los efectos digitales, como puede ser un panel de croma que da mucho juego para crear un infinito de posibilidades o trabajar el mismo discurso, de forma que tenga una cohesión de conjunto con diálogos bien estudiados en pro de la misma disertación. Temas que están muy presentes en las asignaturas de vídeo y composición digital del grado de Multimedia de la UOC.

Después, en postedición, podemos seguir avanzando el lenguaje visual aplicando diversos efectos, escalando planos, aplicando una corrección de color según la tipología del discurso o incrementando el mensaje con los grafismos propios de cada tipo de audiovisual. Todo esto es espectacular y seguro que podemos llegar a nuestro objetivo principal, que es comunicar. ¿Pero qué ocurre con la frescura del discurso? ¿La improvisación o la capacidad de reorientar el discurso? Aparte, claro está, no podemos mantener a nuestro público atento a un audiovisual por un tiempo muy superior.

Pues si no podemos trabajar el audiovisual como lenguaje principal y no caer en el aburrimiento de la presencialidad, ¿qué formas nos brinda la tecnología para escalonar esa adversidad?

Aquí es donde quería llegar: ¡La animación en tiempo real!

¡Uf! Es más que sabido que la tarea de animar es compleja, costosa económicamente y muy, muy limitada en cuanto a la adaptación de la improvisación, más; creo fielmente que es casi imposible improvisar cuando hablamos de animar. Pero no hace falta desesperación ni se adelanta al tirar la toalla, sí que hay una solución, y además, ¡muy divertida!

¡Se trata de poder actuar sobre una capa animada y en directo!

Antes hemos hablado de diversos aspectos que estamos buscando a la hora de innovar el discurso, como la frescura, la improvisación y la aplicación de las nuevas herramientas digitales en pro de un producto final que tenga una relación casi mágica con el público objetivo. ¿De qué hablamos? No les digo nada más, les invito a ver el siguiente vídeo y después seguimos!

En 2016, Adobe y los estudios Fox emitieron por primera vez en la historia de la animación un streaming en directo donde Homer Simpson contestaba las preguntas de sus espectadores en un riguroso directo. Este hecho ha marcado un antes y un después en la forma de comunicar. No solo por poder dotar de “vida” a un personaje animado, pero también ha abierto la caja de pandora a las infinitas posibilidades de crear nuevas formas de comunicar e innovar el discurso. Ya no estamos ante una persona de carne y hueso que habla, ahora podemos tener un personaje propio, con características únicas, enfocado hacia un público concreto, sin perder todo lo que antes mencionábamos, en resumidas palabras, se trata de la adaptación del discurso habitual en las nuevas herramientas digitales.

Al igual que ocurre con la magia, debemos saber que detrás de este efecto sorprendente encontramos a dos elementos claves: Un software potente y un orador con dotes de actor (¡y también con una buena dosis de tecnicismos digitales!)

El software en cuestión es el que habitualmente se utiliza en distintas asignaturas de la UOC, la suite de Adobe Cloud, más concretamente Character Animator. Es un software que, en líneas generales, captura los movimientos del orador con una simple webcam y los transporta a su avatar digital. Es tan simple de utilizar que se vuelve adictivo en cuestión de minutos.

La correlación facial y corporal trabaja sobre un potente motor que captura en tiempo real cualquier movimiento que el usuario realice delante de su cámara. No hay retrasos y la calidad de la física aplicada en cada gesticulación o movimiento, es sorprendentemente buena.

Cierto que el primer paso es trabajar un buen personaje que empatice con el público y aquí entran grandes dosis de creatividades y conocimiento de tu público. Una vez tengamos la idea, pasamos a trabajar con Adobe Ilustrator o Photoshop aplicando un sistema de capas estipulado, donde llegamos a determinar que hará cada parte del cuerpo dibujado.

Otro aspecto muy importante, y no comentado hasta ahora, es la increíble forma de que Character Animator lee los labios y traspasa cada frase hablada en fonemas que el personaje expresa. Esto es posible gracias a un cuidadoso trabajo de capas donde se separan los fonemas que forman el discurso. Como puede ver, todo es simple y complicado a la vez, pero nada que cualquier tecnólogo o tecnóloga pueda aprender en cuestión de algunas horas.

Para llegar a entender y aplicar los mecanismos, es imprescindible visualizar un extenso material que Adobe pone al alcance del público en general, como por ejemplo:

https://www.youtube.com/@okaysamurai

Muy bien, llegados a este punto y para finalizar el análisis, quedaría pendiente solo un apunte: ¿Y si quiero transmitirlo en directo?

Pues no se trata solo de un apunte final, ¡es la base de lo que hemos estado hablando hasta ahora! Si queremos innovar, crear y cautivar a nuestro público en las diferentes reuniones o exposiciones, ¡necesitamos crear el directo!

El streaming en directo de estas características es algo más complejo que un normal, no por material pero, sí, por tecnología. No es que sea extremadamente complicado, pero es necesaria una buena dosis de paciencia y organización, puesto que se deben configurar diferentes aspectos en el ámbito de la transmisión.

Una de estas formas es mediante el software libre OBS, configurando la sesión de streaming según el esquema a continuación.

Las pruebas previas para verificar la calidad de la transmisión son primordiales para llegar a una configuración óptima y, por consiguiente, éxito en el discurso.

Una vez la configuración periférica esté lista, solo quedará pendiente de que el orador-actor haga su papel explicando su contenido e interactuando en tiempo real con su público, que seguramente se estará preguntando: – Estamos delante de una persona o de una máquina?

Sea como fuere, lo importante es que hemos conseguido el reto de comunicar aplicando las nuevas tendencias digitales!

La próxima vez que quiera dar de baja en el servicio de telefonía iré con cuidado con mis intervenciones, ¡no sea que detrás de la joven personaje animada haya una persona de carne y hueso!

Temps d’avatars

Foto: Freepik.

Estem entrant en una era digital on els protagonistes són els avatars. No estem desplaçant les persones de forma absoluta per substituir-les per extensos codis màquina que, conjuntament amb la intel·ligència artificial, són capaços de contestar les preguntes més habituals que cadascú de nosaltres podem formular i de pas, donar-los encara més material per a les seves bases de dades digitals.

Les persones segueixen estant darrere de cadascun d’aquests elements programats que són igualment odiats que estimats.

Els camps d’aplicació de la nova estratègia comunicativa és tan extens com complex, van des dels xatbots d’algunes empreses que només necessitem contestar preguntes simples, com una adreça, una forma de donar de baixa a un servei o comunicar una avaria, passant per altres més complexes que costa saber si estem davant d’una màquina o d’una persona. Tot depèn de diversos factors, però sempre amb un objectiu molt clar; comunicar!

Justament d’això es tracta aquest article, d’exposar el discurs com una eina divertida i que arribi a un determinat públic i d’una forma completament diferent.

No volem explicar ni entrar en detall com és programar un xatbot o quines són les casuístiques que obliguen una entitat a desenvolupar aquest sistema: volem parlar de com comunicar en una era digital on el visual és tan important com el mateix discurs. Poder i saber compaginar el discurs amb la visualització, són premisses per l’orador i per a la pròpia adaptació del discurs amb els formats actuals.

En aquest punt, estaríem ara pensant que la millor manera de poder adaptar el discurs a un contenidor digital, passa expressament per un format audiovisual estàndard, com és el vídeo. I si, és veritat, podem fer un bon treball de preedició amb un guió divertit, tenint en consideració aspectes tan importants del llenguatge visual, com els tipus de plans, les localitzacions, els efectes digitals, com pot ser un panell de croma que dona molt de joc per crear un infinit de possibilitats o també treballar el mateix discurs, de forma que tingui una cohesió de conjunt amb diàlegs ben estudiats en pro de la mateixa dissertació. Temes que estan molt presents a les assignatures de vídeo i composició digital del grau de Multimèdia de la UOC.

Després, en postedició, podem seguir avançant el llenguatge visual aplicant efectes diversos, escalant plans, aplicant una correcció de color segons la tipologia del discurs o incrementant el missatge amb els grafismes propis de cada tipus d’audiovisual. Tot això és espectacular i ben segur que podem arribar al nostre objectiu principal, que és comunicar. Però que passa amb la frescor del discurs? La improvisació o  la capacitat de reorientar el discurs? A part, clar està, no podem mantenir el nostre públic atent a un audiovisual per un temps molt superior. 

Doncs si no podem treballar l’audiovisual com llenguatge principal i no caure en l’avorriment de la presencialitat, quines formes ens brinda la tecnologia per escalonar aquesta adversitat?

Aquí és on volia arribar: L’animació en temps real!

Uf! És més que sabut que la tasca d’animar és complexa, costosa econòmicament i molt, molt limitada quant a l’adaptació de la improvisació, més; crec fidelment que es casi impossible improvisar quan parlem d’animar. Però no cal desesperació ni us avanceu en tirar la tovallola, sí que hi ha una solució, i a més a més, molt divertida!

Es tracta de poder actuar sobre una capa animada i en directe!

Abans hem parlat de diversos aspectes que estem buscant a l’hora d’innovar el discurs, com la frescor, la improvisació i l’aplicació de les noves eines digitals en pro d’un producte final que tingui una relació quasi màgica amb el públic objectiu. De què parlem? No us dic res més, us convido a veure el següent vídeo i després seguim!

L’any 2016 Adobe i els estudis Fox van emetre per primera vegada  a l’història de l’animació un streaming en directe on Homer Simpson contestava les preguntes dels seus espectadors en un rigorós directe. Aquest fet ha marcat un abans i un després en la forma de comunicar. No només pel fet de poder dotar de “vida” un personatge animat però també ha obert la capsa de pandora a les infinites possibilitats de crear noves formes de comunicar i innovar el discurs. Ja no estem davant d’una persona de carn i os que parla, ara podem tenim un personatge propi, amb característiques úniques, enfocat cap a un públic concret sense perdre tot allò que abans mencionàvem, en resumides paraules, es tracta de l’adaptació del discurs habitual a les noves eines digitals.

Igual que passa amb la màgia, hem de saber que darrere d’aquest efecte sorprenent trobem a dos elements claus: Un programari potent i un orador amb dots d’actor (i també amb una bona dosi de tecnicismes digitals!)

El programari en qüestió és el que habitualment s’utilitza en diferents assignatures de la UOC, la suite de Adobe Cloud, més concretament Character Animator. És un programari que, en línies generals, captura els moviments de l’orador amb una simple webcam i els transporta al seu avatar digital. És tan simple d’utilitzar que es torna addictiu en qüestió de minuts.

El mapatge facial i corporal treballa sobre un potent motor que captura en temps real qualsevol moviment que l’usuari faci davant de la seva càmera. No hi ha retards i la qualitat de la física aplicada a cada gesticulació o moviment, és sorprenentment bona. 

És cert que el primer pas és treballar un bon personatge que empatitzi amb el públic i aquí entren grans dosis de creativitats i coneixement del teu públic. Una vegada tinguem la idea, passem a treballar-la amb Adobe Ilustrator o Photoshop aplicant un sistema de capes estipulat, on arribem a  determinar que farà cada part del cos dibuixat.

Un altre aspecte molt important i no comentat fins ara, és l’increïble forma que Character Animator llegeix els llavis i traspassa cada frase parlada en fonemes que el personatge expressa. Això és possible gràcies a un curós treball de capes on se separen els fonemes que formen el discurs. Com podeu veure, tot és simple i complicat alhora, però res que qualsevol tecnòleg o tecnòloga no pugui aprendre en qüestió d’algunes hores.

Per arribar a entendre i aplicar els mecanismes, és imprescindible visualitzar un extens material que Adobe posa a l’abast del públic en general, com per exemple:

https://www.youtube.com/@okaysamurai

Molt bé, arribats a aquest punt i per finalitzar l’anàlisi, quedaria pendent només un apunt: I si vull transmetre en directe?

Doncs no es tracta només d’un apunt final, és la base del que hem estat parlant fins ara! Si volem innovar, crear i captivar el nostre públic a les diferents reunions o exposicions, necessitem crear el directe!

L’streaming en directe d’aquestes característiques és una mica més complex que un normal, no per material però, si per tecnologia. No és que sigui extremadament complicat, però és necessària una bona dosi de paciència i organització, ja que s’ha de configurar diferents aspectes en l’àmbit de la transmissió.

Una d’aquestes formes, és mitjançant el programari lliure OBS, configurant la sessió de streaming segons l’esquema a continuació. 

Les proves prèvies per verificar la qualitat de la transmissió són primordials per poder arribar a una configuració òptima i, per consegüent, èxit en el discurs.

Una vegada la configuració perifèrica estigui a punt, només quedarà pendent que l’orador-actor faci el seu paper explicant el seu contingut i interactuant en temps real amb el seu públic, que segurament s’estarà preguntant: – Estem davant d’una persona o d’una màquina? 

Sigui com sigui, l’important és que hem aconseguit el repte de comunicar aplicant les noves tendències digitals!

La pròxima vegada que vulgui donar de baixa en el servei de telefonia aniré amb compte amb les meves intervencions, no sigui que darrere de la jove personatge animada hi hagi una persona de carn i os!

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Autor / Autora
Andreu Gilaberte
Graduado Multimedia por la UOC, es profesor responsable de las asignaturas de vídeo, fotografía y composición digital. Coordinador de laboratorios de media y herramientas de diseño. Desarrollador de técnicas de interacción digital.
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