De la idea a la materia: o como un martillo clava un clavo

15 mayo, 2018

«Todo conocimiento comienza con la experiencia, pero
no por ello todo él procede de la experiencia »
Kant

En un artículo de 2004 Guillem Turró y Francesc Torralba nos explicaban que las materias procedentes de la rama de Humanidades y de las Ciencias Sociales son necesarias dentro de las escuelas de diseño para que enseñen a estructurar la información para convertirla en conocimiento, educan cognitivamente los alumnos, enseñan las capacidades descriptivas, analíticas, sintéticas y reflexivas a través del lenguaje. Estas materias potencian la articulación verbal y gestual para mejorar la plasmación gráfica. Dan a conocer los orígenes. Ponen sobre la mesa el ¿qué ?, el ¿por qué ?, el ¿cómo? para saber leer e interpretar la realidad más cercana. Ayudan a despertar el eros intelectual y el deber de conocer a uno mismo. Enseñan a dialogar, a reflexionar sobre los métodos, para alcanzar los objetivos. A saber penetrar en el imaginario social, a formar ciudadanos, a desarrollar las categorías «inter» y «trans», a saber interpretar los referentes culturales de las comunidades, a hacer habitable el mundo y humanizar el mundo tecnológico (Turró y Torralba, 2004) [1].


#ConversesDocumenta
De la idea a la materia: o como un martillo clava un clavo
A cargo de Antoni Mañach

29 de mayo a las 18:30 h
Librería Documenta (C / Pau Claris, 144)


Como filósofo sigo los consejos de Turró y Torralba. Pero después de años de ser profesor de historia del diseño, de fundamentos de la proyección y de ética de la profesión, y gestionar diferentes actividades docentes del mundo del diseño, puedo decir que he ido más allá y he mutado a diseñador. Me he sumado a la idea, del profesor Otl Aicher, de la escuela HfG-ULM, que afirmaba que el diseñador es el filósofo del siglo XXI. En las facultades de Diseño formamos los/las alumnos desde 3 ámbitos diferentes: el conceptual, el instrumental y el proyectual. Tres ámbitos que no deben concebirse separados el uno del otro. Teoría y práctica, idea y materia son inseparables. Todo trabajo conceptual es materialización, en el proyecto de diseño: todo artefacto es reflexión.

converses documenta humanidades UOC

Mi trabajo consiste en pasar de la idea a la materia constantemente y enseñar a hacerlo a los alumnos/as a través de los valores éticos, para construir mundo de manera responsable. Proyectamos el mundo con valores éticos para generar bienes para que «el proyecto es la forma más compleja de actividad espiritual. Un proyecto es a la vez analítico y sintético, puntual y general, concreto y principal. Amolda a la cosa y cumple exigencias, se basa en hechos y abre el pensamiento a nuevos espacios. Atiende a los detalles y abre perspectivas» (Otl Aicher, 2002)

En las Conversaciones de la Documenta intentaré explicar cómo, a través de unir diferentes disciplinas, hago reflexionar sobre los valores éticos a los estudiantes para que los conviertan en materia, en producto, en sistema o servicio. Y presentaré algunos de los resultados conseguidos, por los estudiantes, como el «revaixella», «Àger» o «Howl.»

Notas

[1] Francesc Torralba y Guillem Turró.

Bibliografía

Torralba, Francesc; Turró, Guillermo (2004) «El diseño es un humanismo». Elisava Temas de Diseño nº 21 MEMORIA, COMUNICACIÓN, ECONOMÍA Y DISEÑO, Barcelona.

Aicher, Otl (2002) El mundo como proyecto. Editorial Gustavo Gili. Barcelona.

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