«La indisciplina poética del mirar» — Converses a la Documenta

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El filósofo francés Jacques Rancière (1940), en un breve texto que lleva por nombre El teatro de las imágenes, afirma que existe hoy una creencia muy extendida: hay demasiadas imágenes. Algunas veces se acusa a las imágenes de ahogarnos con su poder, otras se les reprocha por anestesiarnos. Las imágenes nos engañan, se decía algunas décadas atrás; las imágenes nos ciegan, se dice hoy. Se suele acusar a las grandes máquinas de información de ahogarnos con un mar de imágenes, pero lo que hacen es todo lo contrario: reducen el número de imágenes antes de ponerlas a disposición. Antes que nada, ordenan su puesta en escena. No es que veamos demasiadas imágenes, demasiados cuerpos, sino que vemos demasiados cuerpos sin nombre que no nos devuelven la mirada que les dirigimos.

A partir de estas reflexiones quisiéramos interrogar la larga tradición del pensamiento que ha asignado un lugar de empobrecimiento de la experiencia a aquellas actividades que se vinculan al espectador y al espectáculo, como si las imágenes fuesen algo frente a lo cual uno se encuentra pasivo: “ya derrotado por su astucia: simulacro que tomamos por realidad; ídolo que tomamos por Dios verdadero; espectáculo donde nos alienamos; mercancías a las que uno vende su alma”. Contrario a esta tradición, Rancière no dejará de afirmar que las apariencias no son una cuestión separada de la realidad, por lo que se hace necesario salir de la lógica pseudoradical que descalifica las apariencias y los simulacros.

Alain Resnais, toma fija de Hiroshima, mon amour. En: Hans Belting,
Antropología de las imágenes. Madrid: Katz, 2007, p.96.

Si queremos realmente lanzar una mirada nueva a lo que las imágenes son, a lo que hacen, a los efectos y afectos que producen, hemos de poner en cuestión las identificaciones que se hacen del uso de las imágenes con la idolatría, la ignorancia y la pasividad. No se trata entonces de una especie de escuela de mirada que nos enseñe a leer, interpretar o decodificar imágenes; tampoco de cómo debemos ver las imágenes o qué debemos ver en ellas. Si no se trata de una formación de la mirada, entonces, ¿cómo podemos ejercitar una mirada indisciplinada? En este encuentro quisiéramos poder reflexionar en torno a esta pregunta y las implicancias que pueda significar este cambio de posición: no estamos frente a las imágenes, estamos entre imágenes. La cuestión es más bien qué hacemos con las imágenes que vemos y cómo nos hacen circular. 

Fecha y Hora
24 abril, 18:30 h
Lugar
Llibreria Documenta (C/ Pau Claris, 144)

Andrea Soto Calderón, doctora en Filosofía, actualmente realiza una investigación sobre la relación entre imagen y ficción en la Universidad Paris 8. Se desempeña como docente de estética y teoría del arte, es profesora colaboradora de la UOC. Sus investigaciones se centran en las transformaciones de la experiencia estética en la cultura contemporánea, la investigación artística, el estudio de la imagen y los medios, la relación entre estética y política.